Mercedes Willat
Artista participante de la exposición "Escalante por Nieto".
Mercedes Willat Real de Azúa
Nació en Montevideo en 1959.
Desde 1988 es directora del área de Diseño del Instituto Strasser y tutora responsable de todas las ediciones de Experiencia Pasarela y las colecciones de egreso de los alumnos de la Tecnicatura en Diseño de Moda. Desde 1990 realiza vestuarios para teatro y publicidad como: El príncipe feliz, La mujer de negro, Las vacaciones de Betty, Bovary y Hamlet. Desde 2004 es la vestuarista de los musicales de The British Schools. En 2011 presenta Lala Legrand para Bicentenario+100 Futuros Vestuarios en el Teatro Solis. En 2014 participa de La Máquina Felisberto, en el Museo de Artes Visuales, con las fotografías retroiluminadas Nostalgia de Margarita I y II. En 2016 presenta dos conjuntos de vestuario y la obra Punto de vista en la exposición Shakespeare Genderless: Los sonetos en el Teatro Solís.
Vestuarios: panamá y tul.
Obra: Las almas muertas, de Nicolai Gogol.
Leí primero la novela ya que no la conocía y me llamó la atención el nombre del criado del protagonista, Petrushka, ya que Amalia tiene su serie de dibujos (llamados Petruchkos) basados en la obra de Stravinsky.
En la adaptación teatral Escalante decide fundir los personajes de Selifán el cochero y Petrushka el criado en uno solo: Selifán.
Elegí entonces el personaje de Selifán/Petrushka y el de la Karabotchka que son personajes menos afrancesados y me permitieron usar una estética más de traje ruso típico, más simple en sus formas, más asimilable a la estética de Nieto.
La ropa está velada por un tul negro para dar la idea de los grises de color tan usados por Amalia y generar también la idea de algo no muy claro, velado, sucio, que representa la corrupción, tema central de la obra, y los manejos rebuscados de los personajes, su codicia y mediocridad.
Realización: Cintia Benítez.
Marisol Gómez Schulz (Santiago, Chile) y Mercedes Willat (Montevideo, Uruguay).
Rebelión, instalación. Ventana de madera, de 48 x 95 cm, tres paneles de vidrio, accesorios de bronce, dos transferencias, maniquí vestido con tul, foco de luz. Obra: Hedda Gabler, de Henrik Ibsen.
Hedda Gabler es una mujer brillante, manipuladora y despiadada que anhela la libertad que tienen los hombres de su época.
El dolor que ésto le causa le impide mirar hacia adentro por lo que su mirada está puesta en el afuera, en los otros, como a través de una ventana. Quema el manuscrito de Løvborg, símbolo de su mente brillante solo permitida al género masculino. La obra de Amalia, de 1941, muestra su aguda racionalidad y estética simbólica que se va purificando y re-significando a través del tiempo.
La mirada incendiaria de Hedda destruye todo lo que le impide ser ella misma. Finalmente decide patear el tablero suicidándose antes que someterse y ocupar su sitio... no es posible aprisionar el pensamiento.
